El sector financiero se encuentra inmerso en una revolución impulsada por la inteligencia artificial (IA), que ha transformado de manera significativa la forma en que las instituciones operan y se relacionan con sus clientes. Un reciente informe revela que el 90 % de las empresas en este ámbito han adoptado soluciones de IA, utilizando software de terceros para perfeccionar sus productos y servicios, optimizar la gestión de riesgos y reforzar la ciberseguridad.
Este avance tecnológico no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también ofrece una oportunidad sin precedentes para maximizar la rentabilidad y aumentar la satisfacción del cliente. Las proyecciones del mercado sugieren que el uso de IA en el sector financiero podría aumentar de 14,790 millones de dólares en 2024 a 43,040 millones de dólares para 2029, marcando un crecimiento anual del 23,82 %.
El impacto de la IA no se limita a la operatividad interna, sino que también transforma los servicios al cliente. Según el Informe Ascendant de Minsait, la personalización en la aprobación de créditos ha mejorado significativamente, reduciendo el tiempo de respuesta en un 70 % y aumentando la precisión en un 30 %. Esta optimización no solo beneficia a las instituciones financieras, sino también a los clientes, quienes experimentan procesos más ágiles y menos costosos.
Para los clientes, las ventajas de la IA son numerosas. Desde la aceleración en el procesamiento de préstamos hasta la disponibilidad de soporte las 24 horas, pasando por un asesoramiento financiero más personalizado, la IA está redefiniendo la experiencia del usuario. Además, la tecnología mejora significativamente la evaluación de riesgos y facilita la detección proactiva de fraudes, fortaleciendo la seguridad para todos los involucrados.
Antonio García Rouco, director general de GDS Modellica, subraya cómo la IA no solo optimiza la calidad de los servicios financieros, sino que también fomenta la lealtad del cliente a través de una atención más personalizada. GDS Modellica, con más de 17 años de experiencia, apoya a las instituciones en la toma de decisiones interconectadas a lo largo del ciclo de vida del cliente, potenciando la competitividad del sector.
La evolución continua de la inteligencia artificial sugiere que estamos apenas al comienzo de una revolución financiera que promete un futuro más ágil, seguro y accesible para todos los implicados. Esta transformación tecnológica avanza rápidamente, cambiando la manera en que las instituciones gestionan las finanzas y remodelando el panorama financiero global.