En 2003, cuando Internet comenzaba a expandirse rápidamente y los teléfonos móviles todavía estaban lejos de ser los smartphones que conocemos hoy, Skype llegó para revolucionar la manera en que nos comunicábamos. La compañía, fundada por Niklas Zennström y Janus Friis, introdujo una herramienta innovadora que permitía realizar llamadas de voz a través de la red, un concepto conocido como VoIP (Voice over Internet Protocol). Skype ofreció, por primera vez, una alternativa económica a las llamadas internacionales, permitiendo hablar a precios irrisorios, incluso con usuarios de otros continentes.
A lo largo de los años, Skype se convirtió en la plataforma predilecta para realizar videollamadas, charlar por texto y compartir archivos de manera sencilla, siendo una de las aplicaciones más populares a nivel global. Sin embargo, el viaje que comenzó hace más de 20 años llega a su fin, ya que Microsoft ha anunciado que el 5 de mayo de 2025 cerrará Skype y centrará sus esfuerzos en Teams, la plataforma que adquirió hace años y que ha evolucionado como herramienta de colaboración profesional.
Los primeros pasos de Skype
En sus inicios, Skype marcó el comienzo de una nueva era para las comunicaciones digitales. La aplicación permitía realizar llamadas de voz a través de Internet de forma gratuita entre usuarios de la plataforma, y a precios mucho más bajos que las operadoras tradicionales para llamar a teléfonos móviles o fijos. Era, sin lugar a dudas, una revolución en el mundo de las telecomunicaciones.
La interfaz era sencilla y la calidad de las llamadas sorprendía por su claridad, lo que permitió a Skype conquistar a millones de usuarios en todo el mundo. En la era en la que MSN Messenger y AOL Instant Messenger dominaban las aplicaciones de mensajería, Skype consiguió abrirse un espacio para la comunicación por voz y video.
La compra por Microsoft y el auge de las videollamadas
En 2011, Microsoft adquirió Skype por 8.500 millones de dólares, con la intención de integrarlo en su ecosistema y darle un enfoque más profesional. Aunque la compra inicial fue recibida con entusiasmo, fue a partir de la expansión de la banda ancha y la adopción masiva de smartphones cuando Skype realmente comenzó a ser una herramienta esencial para usuarios de todo el mundo.
Con el tiempo, Skype fue ganando terreno en el mercado empresarial, permitiendo a las empresas mantener reuniones virtuales, hacer videoconferencias y colaborar en tiempo real, lo que ayudó a su consolidación en el ámbito profesional. No obstante, los usuarios particulares continuaron utilizándolo para llamadas internacionales, mensajes de texto y videollamadas con amigos y familiares. En una era donde WhatsApp, FaceTime y otras aplicaciones de mensajería ya estaban comenzando a tomar protagonismo, Skype aún seguía siendo una de las principales opciones en el mercado.
El cambio hacia Microsoft Teams
A pesar de su relevancia, el mercado de las comunicaciones digitales comenzó a cambiar con la llegada de nuevas aplicaciones como Zoom, Slack y, en especial, Microsoft Teams. Esta última plataforma, desarrollada por Microsoft, pasó de ser una herramienta empresarial a una plataforma que empezó a competir con Skype en varios aspectos. Con el tiempo, Teams se consolidó como la herramienta predilecta para las empresas, especialmente durante la pandemia, cuando el teletrabajo y las reuniones virtuales se convirtieron en una necesidad.

Es así como Microsoft, al ver el crecimiento de Teams y su adopción masiva, decidió cerrar Skype y enfocarse en potenciar su herramienta empresarial. A partir del 5 de mayo de 2025, Skype dejará de estar operativo, y los usuarios deberán migrar sus contactos y mensajes a Teams. A pesar de la facilidad de la transición, el cierre de Skype marca el fin de una era para muchos usuarios que aún utilizaban la plataforma tanto para fines personales como profesionales.
¿Qué pasa con los usuarios de Skype?
Microsoft ha asegurado que la transición de Skype a Teams será lo más sencilla posible. Los usuarios podrán iniciar sesión en Microsoft Teams con sus cuentas de Skype, y sus chats, contactos y registros de llamadas se transferirán automáticamente. Sin embargo, uno de los principales cambios es la desaparición de ciertas funcionalidades, como la posibilidad de realizar llamadas a números fijos y móviles a través de Skype, algo que hizo famosa a la plataforma en sus primeros años.
El legado de Skype
Aunque Skype ha sido superado por otras aplicaciones en popularidad y funcionalidad, su impacto en la comunicación digital es innegable. Skype cambió la forma en que nos conectamos con otros, facilitó las llamadas internacionales a precios más bajos y permitió las primeras videollamadas de calidad para millones de personas. También fue una de las primeras plataformas que integró la posibilidad de enviar mensajes instantáneos, compartir archivos y hacer videollamadas, todo en una sola aplicación.
En su época dorada, Skype fue sinónimo de conectividad global, ayudando a millones de personas a mantenerse en contacto, independientemente de las fronteras. Sin embargo, en un mundo donde las aplicaciones de mensajería y videollamadas se han diversificado y donde Teams ha tomado el liderazgo en el ámbito profesional, el final de Skype parece un paso natural para Microsoft.
Un adiós con nostalgia
En definitiva, Skype se va después de 22 años de historia, pero su legado perdurará. Las nuevas generaciones quizá no entiendan el impacto que tuvo en la comunicación digital, pero para aquellos que vivieron sus primeros años, Skype siempre será recordado como una de las plataformas pioneras que sentaron las bases de las aplicaciones que hoy usamos todos los días.
Microsoft Teams será el sucesor de Skype, y aunque muchos lamentarán la desaparición de algunas de sus características, el cierre de Skype marcará el fin de una era de comunicaciones que, en su momento, nos permitió acercarnos más a personas de todo el mundo, y que, por un tiempo, fue sinónimo de innovación en las telecomunicaciones.